Localización
Nombre del manantial/fuente:
Manantial de la HUERTA EL AZAFRANERO
Pedanía, aldea, paraje o pago:
Huerta El Azafranero
Municipio:
Linares
Provincia:
Jaén
Coordenadas UTM (ETRS89):
X: 454090.535 Y: 4219721.511 Huso: 30
Altitud: 280 m
Nombre de la cuenca:
Guadalquivir
Nombre de la subcuenca:
Guadalimar
Nombre del río/arroyo que origina (si procede):
Nombre de la masa de agua subterránea (si procede):
Sin clasificar
Nombre del Espacio Natural Protegido (si procede):
No está incluida en la Red de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía
Procedencia del agua subterránea
Nombre del lugar o sierra de donde se supone procede el agua subterranea:
Naturaleza de las rocas por donde se supone circula el agua subterranea:
Rocas detríticas
Tipo de surgencia
Galería, cimbra, zanja o mina de agua
Descripción
El Manantial de la Huerta El Azafranero se encuentra localizado a la espalda de las ruinas del “Cortijo Vista Alegre”, según los mapas del IGN, en la parcela catastral conocida por “Huerta Golondrina” por lo que se desconoce de dónde le llega el nombre actual, pero debe ser antiguo. Por otro lado, en los mapas históricos aparece denominado como “Casilla de Don Alonso Contreras” y, casualmente, a 875 m en sentido Noroeste, en el propio mapa del IGN aparece una pequeña casa denominada como “Casilla de Contreras”. Es posible que, antaño, todo fuera propiedad de la misma persona y el Cortijo Vista Alegre, que hoy vemos abandonado y ruinoso fuera, en su momento, un pequeño cortijo con bastante movimiento.
El manantial en sí no es más que una pequeña mina de agua, en galería, de apenas un metro de profundidad y que permite aflorar el agua y que ésta se acumule. El agua es conducida a través de un largo tubo de metal (acero) hasta una próxima alberca, con restos de haber tenido otra estructura anterior. La alberca tiene un par de rezumes que encharcan la zona y que crean un reguero que debe terminar en el cercano Río Guarrizas, que dista apenas 100 m al Este de la alberca. Uno de los rezumes parece que pudiera ser reciente, posiblemente debido a las filtraciones de la alberca. El otro, por el contrario, se ve que es un rezume antiguo puesto que es posible apreciar diversas construcciones para aprovechar el agua en forma de un par de pilas que, en su momento, debieron almacenarla para el abastecimiento de los animales, de haberlos habido.
En la visita realizada en Mayo de 2019, dos personas indicaron que el manantial estaba bastante cerrado, llenos de zarzas, al amparo de unos álamos. Tanto fue así que la última vez que intentaron beber, el año pasado (2018), no lo consiguieron. Para sorpresa, en la visita de 2019 el manantial se encuentra totalmente accesible, toda la vegetación que debió haber y que, de hecho, aparece en imágenes de satélite, ha sido quemada. Apenas quedan restos de las inmensas zarzas y otras plantas arbustivas. De los álamos que pudieron haber, solo han quedado algunos muñones por tronco, también quemados. La zona afectada solo ha sido el manantial por lo que, es de suponer, se ha hecho recientemente, precisamente para destaparlo.
El acceso es bastante complejo, no tanto por la imposibilidad de acceder al manantial sino por el recóndito lugar en qué se halla, prácticamente en medio de viejas huertas que actualmente son todos campos de inmensos olivares. Se sale de Linares en dirección Arquillos. Pasado el puente sobre las vías del tren de la Estación de Vadollano, unos 1.650 m después, nos encontraremos con el camino llamado “Camino de Lentiscares”, que vuelve a cruzar por la carretera (se cruza también unos 600 metros antes, cerca de la Estación). Tomamos el camino de Lentiscares a nuestra derecha donde pronto nos toparemos con una cancela prohibiendo el paso. Con autorización es posible entrar en coche. El camino no es perfecto, pero puede hacerse en turismo ya que, a pie, habrían fácilmente 2.6-2.7 km. Seguimos el camino que va bordeando el paraje conocido como El Piélago (Cortijo Fte. De La Higuera) que no tiene desvíos hasta llegar a una bifurcación que debemos coger a la izquierda (a 835 m desde la carretera) en un giro de 90º y que se dirige al cortijo Golondrina. Unos 300 m después, nos sale un camino a la derecha de nuevo a 90º y éste, de seguir por él, nos permitirá acercarnos a las inmediaciones de los restos del Cortijo Vista Alegre, unos 1.300 m más adelante. Dejando el coche, podremos ir a pie al cortijo pues los viejos caminos que llevaban a él han terminado por perderse. Llegado a éste, le daremos la vuelta por su parte derecha donde hay unos rudimentarios escalones que nos permitirán bajar sin complicaciones a la fuente, si bien, lo más fácilmente divisable será la alberca.
Instalaciones asociadas
Alberca
Caudal medio
Caudal:
Muy bajo (0-1 l/s)
¿Se agota?:
No se agota nunca
Uso del agua
Regadío.
Acceso y uso público actual
Acceso: Complicado
Uso público actual: Bajo
Valoración de las instalaciones y facilidad de uso:
Inexistentes.
Estado de conservación
Deficiente
Amenazas, impactos y presiones
Contaminación.
Agroquímicos
Descripción arquitectónica
El manantial tiene varios componentes que pasamos a enumerar.
En primer lugar, tenemos el propio manantial, una mina de agua excavada a ras de suelo que profundiza no más de un metro en la pared y que apenas llega a 30-40 cm de profundidad en el suelo. Protegiendo la entrada, está semitapada con una piedra horizontal dejando apenas una pequeña abertura alargada que nos permite ver el interior. De la piedra, que parece haber sido hecha de barro, un pequeño tubo metálico (acero) se encuentra encastrado sobresaliendo unos 10 cm. En la visita de 2019 la fuente filtra agua por su base pero es deducible que en buenas épocas de lluvia llegue a tal nivel el pocillo que mantiene el agua que podría brotar fácilmente por el caño o, al menos, esa parece ser la idea. El interior de la mina está totalmente tapizado en piedras, tanto suelo como paredes y techo. La anchura de la mina debe ser de apenas medio metro, pero es algo más larga que ancha.
El agua es sacada por gravedad a través de un caño de hierro (acero) que no parece muy antiguo. Éste sale del manantial soterrado (no es apreciable), pero sale al exterior unos 5-6 m después, dejando chorrear el agua del manantial por su extremo, que queda al aire y sobre la alberca un metro, aproximadamente, donde es recogida el agua. No es el único caño, más encastrado en la pared de la alberca y mucho más escondido, se aprecia otro de mayor edad del que apenas sale un chorrito fino de agua. Es presumible pensar que éste fuera el caño original pero, posiblemente por taponamiento, no desalojaba agua suficiente, quizás por eso pusieron otro por encima.
Por último, tenemos una alberca de regulación de un metro y medio de altura (o más), y de un tamaño, aproximado de 6.5 x 4.5 m de forma rectangular. Por su base, la alberca tiene un par de pérdidas de agua, una por su parte central, que no parece muy antigua, otra habitual por su parte derecha (si la miramos de frente) pues, a los pies de una higuera o lo que ha podido quedar de ella, se aprecia un hueco en la pared de la alberca por la que rezume agua que, a su vez, era recogida en un par de pilas a diferentes alturas, ahora cegadas y de formas irregulares.
Valores sectoriales
Científico/Didáctico: -
Minero/Medicinal: -
Paisajístico/Pintoresco: -
Otros:
Medio-ambiental: -
Recreativo/Turístico/Uso Público: -
Histórico/socio-cultural: -
Arquitectónico: -
Económico: -
Arraigo/Aprecio popular: -
Valoración general
Baja
Nombre del autor/es y fecha de la ficha
L. Peraira Navarrete, R. Garzón (Agentes de Medio Ambiente) y A. Ventas
26-10-2009
Advertencia
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